Cómo hacer un Gel de Baño para Bebés casero con Aceite de Caléndula y Extracto de Avena
Receta creada por Jabonarium el 10 de Septiembre de 2021
- Clasificado en:
- Jabones caseros
- Jabón líquido casero
¡Hoy os traemos una receta especial para los más peques! Se trata de un gel de ducha extra suave para la piel de bebé.
Gracias a sus ingredientes, entre los que destacamos la Trehalosa, el Extracto de Avena y el Aceite de Caléndula, la piel quedará calmada e hidratada, cuidando a nuestros más pequeños.
¡Vamos a ver como se hace!
Ingredientes para hacer el Gel de Baño para Bebés
- 100 g de Aloe Vera Puro
- 10 g de Trehalosa
- 10 g de Glicerina Líquida Vegetal
- 12 g de Extracto de Avena
- 62 g de Coco Glucoside
- 50 g de Decyl Glucoside
- 5 g de Aceite de Caléndula
- 2,5 g de Goma Xantana
- 2,5 g de Leucidal
- 2,5 g de Aceite Esencial de Lavanda
- 10 gotas de Vitamina E Tocoferol
- Ácido Láctico para ajustar pH
Elaboración paso a paso del Gel de Baño para Bebés
- Pesar todos los ingredientes
- Mezclar todos los ingredientes en orden para que quede una mezcla homogénea. Mezclar muy suave para no formar espuma.
- Ajustar el pH a 6.5 una vez hecha la mezcla (aproximadamente 2 g de Ácido Láctico)
Beneficios de los ingredientes del Gel de Baño para Bebés
- Aloe Vera Puro: es antioxidante, calmante y nutritivo. Aporta un gran frescor y es muy bueno para pieles grasas debido a su poder astringente (retrae los tejidos).
- Trehalosa: es capaz de prevenir la desnaturalización de las proteínas reforzando la función de la barrera de la epidermis y previniendo así la deshidratación.
- Glicerina Líquida Vegetal: es un producto altamente hidratante y emoliente (evita la pérdida de agua). Es ideal para utilizarla tanto en piel como en cabellos, con lo que así es un ingrediente básico en cosmética casera.
- Extracto de Avena: es rico en minerales y vitaminas y presenta propiedades antiinflamatorias, purificantes, antisépticas, humectantes, hidratantes y emolientes. Es un excelente acondicionador de la piel y del cabello.
- Coco Glucoside: es un tensioactivo natural, no iónico y muy suave por lo que resulta ideal para todo tipo de productos limpiadores y espumantes, especialmente para pieles sensibles. Produce una espuma excepcional y muy estable por lo que está muy indicado en la elaboración de champús y geles de baño caseros.
- Decyl Glucoside: produce una espuma abundante y suave, apto para los más pequeños.
- Aceite de Caléndula: mejora la textura de la piel reseca o agrietada, desinflama los tejidos, es cicatrizante, hidrata y da elasticidad a la piel. Indicada para tratar verrugas, acné, úlceras varicosas, edemas, escaras, rozaduras, quemaduras, dermatitis del pañal, manchas en el rostro, etc.
- Goma Xantana: otorga a las cremas y lociones una buena sensación en la piel durante y después de la aplicación.
- Leucidal: proporciona beneficios cosméticos gracias a sus péptidos, estas propiedades hacen que sea ideal para aplicaciones sobre algunas enfermedades de la piel y del cuero cabelludo.
- Aceite Esencial de Lavanda: tiene propiedades de acción antiséptica (impide el desarrollo de microorganismos) y por esto es apropiado para todo tipo de pieles, desde las juveniles, grasas, impuras o con acné hasta las secas, maduras o con problemas específicos. Otros beneficios del aceite de lavanda son que es antidepresivo y estimulante de las defensas del organismo.
¿Tienes alguna duda? Déjanosla en los comentarios de este post para poder ayudarte con mucho gusto. ♥
Hacer cosmética natural y casera tiene muchas ventajas: obtener un producto adaptado a ti y a las necesidades de tu piel y cabello, eliminar tóxicos de cosméticos tradicionales e ingredientes innecesarios, conocer cada ingrediente de la fórmula, reducir plásticos y, además, disfrutar de un buen rato potingueando.
Sin embargo, es importante seguir ciertos pasos para que el proceso de elaboración sea seguro y no te cause reacción alérgica o irrite tu piel:
- Desinfecta los utensilios, envase y mesa de trabajo antes de empezar. ¡Se tarda sólo 1 minuto!
- Utiliza guantes, mascarilla y gafas en aquellas elaboraciones que lo requieran.
- Haz una medición de pH de la elaboración final para asegurarte de que está en el rango correcto. Puedes corregirla fácilmente. Sube el pH utilizando un álcali como el bicarbonato. Bájalo con una solución ácida. Por ejemplo unas gotas de ácido láctico o ácido cítrico.
- Hay que probar la elaboración siempre en una zona reducida de la piel para comprobar que no hay ninguna reacción adversa.
- Utiliza los ingredientes en su dosis correcta. La indicamos en todas las páginas de producto. Si tienes dudas sobre alguno, pregúntanos! ♥ No nos hacemos responsables del mal uso de los productos y de la incorrecta dosificación de los mismos en las elaboraciones.