Cosmética Casera
en Jabonarium

Piel grasa

Normalmente estas pieles tienen tendencia acnéica por el exceso de producción de sebo y por tanto los aceites que utilizaremos serán aquellos que no aportan exceso de grasa y purifican la piel.

• Aceites o grasas para pieles grasas: de jojoba, cáñamo, avellana, higo chumbo, neem, macadamia.
• Aguas para pieles grasas: hidrolato de geranio, romero, árbol del té.
• Principios activos para pieles grasas: exfoliantes, antibacterianos, reguladores del sebo, antiarrugas.
• Aceites esenciales para pieles grasas: árbol del té, romero, lavanda, limón, ylang ylang.

Piel mixta

Viene a ser una mezcla entre piel grasa y seca. Suele tener zonas más grasas y zonas secas o lo que se denomina zona T de la frente, nariz y barbilla grasa, teniendo el resto más seca.

• Aceites o grasas para pieles mixtas: jojoba, cáñamo, onagra, avellana.
• Aguas para pieles mixtas: hidrolato de lavanda, romero, geranio, té verde.
• Principios activos para pieles mixtas: antiarrugas, antibacterianos, exfoliantes, reparadores, reafirmantes, hidratantes.
• Aceites esenciales para pieles mixtas: lavanda, árbol del té, ylang, manzanilla.

Piel seca

Este tipo de piel necesita sobre todo hidratación y nutrición. La piel seca es más propensa a la aparición de arrugas por lo que debemos hidratarla y nutrirla en profundidad con aceites y principios activos.

• Aceites o grasas para pieles secas: rosa mosqueta, jojoba, argán, granada, aguacate, germen de trigo.
• Aguas para pieles secas: hidrolato de jazmín, azahar y rosas.
• Aceites esenciales para pieles secas: jazmín, rosas, ylang, mirra, incienso, palo rosa.
• Principios activos para pieles secas: antiarrugas, antioxidantes, nutritivos, hidratantes, reafirmantes.

¿Sabes ya qué tipo de piel tienes? ¡Seguro que sí! Vamos con otra lección teórica…

En muchas recetas encontrarás los términos Fase Acuosa, Fase Oleosa o Aditivos. ¿Qué es esto? Te lo explicamos:

Se entiende como fase aquel conjunto de ingredientes que son solubles entre ellos mismos, es decir, que son capaces de diluirse entre ellos y crear una solución homogénea, a veces incluso aplicando movimiento o temperatura. Vamos a ver cuantas fases suele haber en un cosmético casero.

Fase Acuosa

Es la fase donde utilizaremos agua destilada o desmineralizada, aguas florales, hidrolatos, infusiones que contengan principios activos de plantas, aloe vera, etc. En definitiva, ingredientes acuosos.

Esta fase suele ocupar entre el 50-60% de la emulsión, y en ella también añadiremos los principios activos que son solubles en aguas. Esta propiedad siempre se indicará en el apartado “Detalles” de nuestros principios activos.

Fase Oleosa

En esta fase incluimos los aceites vegetales, mantecas, ceras, emulsionantes y principios activos solubles en grasas que no se degraden por el calor. Esta fase suele ocupar entre el 30-40% de la emulsión.

Aditivos

A partir de aquí se añaden los aditivos que no hayamos introducido en la fase oleosa y acuosa. Aquí incluimos distintos ingredientes:

• Principios activos. Son aquellos productos que darán la “chicha” a la crema, aportando las mejores propiedades: antiarrugas, antioxidantes, reafirmantes, hidratantes, nutritivos, remodelantes, exfoliantes, anti acné, vitaminas, ceramidas, etc. Hoy día existe una lista interminable en el mercado de la cosmética.
• Conservantes. Siempre que formulemos un producto que contiene agua o líquido acuoso es imprescindible agregar un conservante. Entre los más usados tenemos Cosgard, Leucidal o Sharomix. Estos tres son conservantes de amplio espectro. ¿Amplio qué? Significa que tienen un alto poder de conservación frente a bacterias, mohos, levaduras y cándidas.La dosis según el tipo de conservante suele ser entre un 0,5 y 1% del total de la preparación.
• Antioxidantes. Son ingredientes que evitan que las grasas se oxiden. El mejor y más común es la Vitamina E - Alfatocoferol.
• Ingredientes para aromatizar la crema. Si buscamos que la crema sea lo más natural posible usaremos aceites esenciales, eligiendo éstos según la finalidad de la crema y también el gusto olfativo de cada persona. La dosis máxima debe ser un 1% del total de la preparación. También podemos usar fragancias de uso cosmético.

En nuestra tienda encontrarás en cada página de producto un apartado donde pone dosis y generalmente seguido de un porcentaje. Esto se refiere a la dosis recomendada de ese producto dentro de cualquier preparación cosmética. Más cantidad puede llegar a irritar y perjudicar, y menos cantidad puede llegar a no causar efecto alguno.

Pongamos un ejemplo. Imagina que quieres añadir a tu cosmético el producto Botox Vegetal, en el cual viene indicado que la dosificación recomendada es entre el 1% y el 5%. Vamos a coger una dosis del 2,5% e imaginemos que el peso total de nuestro preparado cosmético será de 100 gramos.

¿Qué cantidad de Botox Vegetal corresponde en este preparado?

Es una regla de tres sencilla:

100 gramos es el 100% de mi preparación, ¿cuanto es el 2,5%?

100 gramos ------------------- 100%
x gramos ----------------------- 2,5%

Multiplicamos 100 por 2,5 y dividimos el resultado entre 100. Esto nos da 2.5 gramos.

Tenemos que echar a nuestra preparación 2.5 gramos de Botox Vegetal. ¡Perfecto! Te recomendamos siempre medir en peso tus dosificaciones, es decir, en gramos.

Si en un producto no se indica dosis significa que no tiene límite y que incluso se puede utilizar directamente, sin mezclar con nada. No obstante, puedes preguntarnos siempre para salir de dudas, ¡de hecho te lo recomendamos!